El SEO ( search engine Optimization) es una disciplina que permite optimizar los motores de búsqueda para mejorar la visibilidad de nuestro sitio web. Actúa sobre los resultados orgánicos de los diferentes buscadores para tratar de aparecer en los primeros puestos en las búsquedas y así aumentar la probabilidad de que se consulte o acceda a nuestra página web.
Los motores de búsqueda intentan entender sobre qué trata cada una de nuestras páginas web para así determinar si estas son o no útiles para los usuarios. Analizan los contenidos y mediante el cálculo de unos algoritmos determinan qué peso o visibilidad vamos a conseguir para que nuestra Web aparezca en las primeras posiciones de las búsquedas.
El SEO actuará sobre los contenidos teniendo en cuenta las lógicas de los buscadores y por tanto, nos ayudará a mejorar el tráfico de visitas de nuestro sitio Web.
Es importante resaltar que no hay atajos ni fórmulas milagrosas para lograr un buen posicionamiento. Este requiere de un trabajo paciente, riguroso y persistente ya que el SEO requiere de una continuidad a largo plazo. Hay que desconfiar, por tanto, de las ofertas que prometen estar arriba de forma rápida.
Para establecer una estrategia SEO hay que realizar las siguientes acciones:
- Un análisis de mercado: este analizará nuestras fortalezas y debilidades, qué queremos resaltar en las búsquedas y cómo podemos diferenciarnos de nuestra competencia. Además, realizaremos un análisis de nuestros competidores.
- Auditoría del sitio Web: Debe analizarse cómo está creada la página, qué fallos de estructura pueda tener y cómo se han estructurado los contenidos. Se analizarán también otros temas técnicos, como los tiempos de carga, enlaces, etc.
En base a estos análisis llegaremos a la parte fundamental: La redacción SEO en la que identificamos y redactamos las palabras clave que deberemos incorporar a nuestro sitio. Existen distintos tipos de agrupaciones que deberemos tener en cuenta: palabras clave, meta descripciones, meta títulos, etc., que, combinadas acertadamente, comenzarán a producir el efecto deseado: mejorar nuestro posicionamiento en las búsquedas orgánicas de los buscadores.
Pero la clave del éxito está en la implantación de una metodología que permita analizar los resultados para ir ajustando nuestro posicionamiento. Se trata de un proceso de mejora continua imprescindible ya que el SEO no es algo estático que se acaba con la inclusión de los contenidos clave en la web. Hay que tener en cuenta que nuestros competidores más dinámicos realizan continuos ajustes, lo que obliga a revisar nuestros contenidos, tener en cuenta la afectación de cambios en la estructura de nuestra web, revisar y personalizar links, fortalecer contenidos, alimentar un blog, ayudarse de herramientas de análisis…
El mundo online es extremadamente dinámico, lo que obliga a un trabajo continuo. Solo obtendremos buenos resultados si somos conscientes de que tenemos que invertir en tiempo y recursos.
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